domingo, 19 de octubre de 2014

5 lecciones de vida que nos ha enseñado Seiya de Pegaso

Artículo escrito por: Boris Esteban Bernal Castillo.


1. Hay que empezar desde abajo para llegar lejos, Seiya empezó siendo un caballero de bronce (el rango más bajo dentro del ejército de Athena), pero debido a su esfuerzo fue capaz de vestir la armadura dorada de Sagitario, la armadura del dios Odín e incluso pudo evolucionar su armadura de bronce de Pegaso a una divina.

2. Esta lección va relacionada con el punto anterior, Seiya a pesar de ser un caballero de bronce peleó con valentía frente a rivales de mayor categoría, eso nos enseña que no debemos bajar la mirada ante personas que en los papeles se presentan superiores a nosotros. Seiya eleva su energía (cosmo) para lograr hazañas, nosotros también podemos incrementar nuestra fuerza que llevamos dentro, esa es la forma en la que se logran las mejores victorias.

3. Seiya cada vez que es derribado se levanta recordando a Athena, a sus amigos y a su hermana, eso le da fuerza para continuar en la batalla. Cuando estamos rendidos y tirados en el suelo debemos recordar a los seres que nos quieren y apoyan, en los combates de la vida nunca estamos solos, hay gente que siempre está pendiente de nosotros.

4. Seiya en el enfrentamiento contra Misty de Lagarto (caballero de plata) afirma que cada derrota sufrida lo ha convertido en un mejor guerrero, en dicho combate Pegaso logra la victoria demostrando que no hay que ser perfecto para triunfar. En vez de quejarnos de nuestras derrotas, debemos aprender de ellas, porque ese aprendizaje nos va a permitir ser mejores tanto ahora como en el futuro.

5. Seiya es el héroe protector de Saori Kido (Athena), es fiel a ella, nunca abandona a su musa y por ella está dispuesto a sacrificar su propia vida, es todo un ejemplo de lealtad, el amor que siente por su diosa le da un enorme plus adicional a su poder. En nuestra vida debemos ser leales a las personas que amamos, nunca hay que traicionarlas, al contrario, nuestra misión es protegerlas y dar nuestra propia vida para que nada malo les pase.